Pongamos que has contratado un nombre de dominio, alojamiento web, has encargado el diseño de un sitio web a una empresa o freelance. Ya está todo listo y validado. Tu web se puede lanzar. ¿Ya se ha acabado el trabajo?, ¿es suficiente con esto?
La respuesta es no. A corto plazo puede que si, pero a la larga van a surgir problemas.
Hoy en día un sitio web medio no se hace usando ficheros estáticos, sino que se usan bases de datos, lenguajes de programación, librerías Javascript, fuentes, quizás algún framework CSS. Todo esto ya sea mediante programación a medida o, como es más habitual, recurriendo a algún gestor de contenidos (CMS) como WordPress, el más utilizado en los últimos años.
Por tanto un sitio web tiene una cierta complejidad. Como todo sistema complejo, conviene llevar un mantenimiento del mismo por que algunas de sus partes pueden fallar.
Podríamos hacer un símil con un coche. Lo compras, pagas los impuestos, el seguro, pones combustible y puedes circular con él. ¿Verdad que no es suficiente con esto a medio/largo plazo? Efectivamente habrá que hacer revisiones, sustituir componentes que se desgastan, otros que fallan inesperadamente, etc.
Con un sitio web ocurre lo mismo. Parte de los componentes utilizados pueden fallar, detectarse agujeros de seguridad a subsanar, cambios tecnológicos o en los navegadores web que impliquen realizar actualizaciones, etc.
Motivos para realizar mantenimiento web
Ya te hemos dado algún motivo, pero vamos a detallar un poco más algunas razones por las que es conveniente, y necesario en muchos casos, hacer un seguimiento de un sitio web y hacer un mantenimiento adecuado.
Por seguridad
Sea cual sea la plataforma o las tecnologías usadas para construir tu web, aparecen agujeros de seguridad que deberían ser subsanados para no dejar expuesta la web a posibles atacantes.
Cuanto más popular se vuelve una tecnología, plataforma o gestor de contenidos, más errores se descubren y más atacantes especializados surgen.
Como puedes comprobar en esta página de Patchstack, se detectan problemas de diversa consideración prácticamente a diario en distintos componentes de WordPress.
Hay que estar al tanto de los agujeros graves de seguridad y sus posibles soluciones, ver si hay algún parche o versión actualizada que corrige los problemas detectados. De lo contrario, podrían atacar tu web y perder datos, que te los roben, perder el control de la página etc.
Además el nivel de seguridad por defecto que ofrecen muchos gestores de contenidos es muy mejorable. Para aumentarlo pueden instalarse plugins y llevar a cabo cambios en la configuración del servidor y de sus diferentes componentes, para proteger en la medida de lo posible tu web y tus datos.
Por funcionalidad
Con esto nos referimos, por un lado, a que todo siga funcionando correctamente, y por otro, a poder disfrutar de nuevas funcionalidades y características.
En ocasiones hay librerías, plugins y otros componentes utilizados en tu web que dejan de funcionar. Las causas pueden ser varias, como incompatibilidades con otros componentes, actualizaciones fallidas, cambios en APIs o plataformas externas que se utilicen, etc.
Por otro lado, estos componentes y piezas de software son elementos «vivos» que evolucionan, se actualizan con nuevas funcionalidades, se amplían características, se llevan a cabo mejoras de rendimiento…
Estar al tanto de todo ello y llevar a cabo las actualizaciones oportunas de todas estas piezas de software, hará que tu web (y por tanto tus usuarios) se beneficie de las nuevas funcionalidades, mejoras, y que todo funcione correctamente.
Por rendimiento y velocidad
Aunque se haya hecho un buen trabajo de base y el sitio web sea rápido en el momento de su lanzamiento, con el tiempo la navegación por la web quizás se vuelva más lenta, las páginas tarden más en responder y en cargar.
Esto puede deberse a una degradación del rendimiento de la base de datos, ya sea por la cantidad de datos y registros generados, información residual innecesaria no eliminada, restos de antiguos plugins o componentes, tablas no optimizadas, etc.
Pero también puede deberse al uso excesivo de imágenes no optimizadas (más grandes y pesadas de lo necesario) o de elementos externos incrustados, como por ejemplo vídeos, fuentes, librerías JS o CSS.
Además pueden emplearse diversas tecnologías, métodos y prácticas como el uso de cachés, compresión de ficheros, carga diferida, precarga… que contribuyen a mejorar los tiempos de respuesta.
Por otro lado habrá que prestar atención al alojamiento, sus características hardware, ver si el servidor utiliza versiones actuales tanto de la base de datos, del servidor web, versión de PHP, etc.
Por imprevistos y resolución de incidencias
Cualquier web publicada en internet está expuesta a cualquier tipo de ataque. Esto es así.
Aunque no se sufra ningún ataque exitoso puede ocurrir que de repente algo deje de funcionar. Es habitual que suceda durante algún proceso de actualización, pero también puede ser debido a algún fallo no detectado en la programación de algún componente, caduque algún servicio como el certificado SSL, dominio, alojamiento…
En un momento cualquiera de un día cualquiera, puede producirse algún error o incidencia que haya que resolver. En estos momentos es cuando se desea tener a algún profesional cualificado capaz de resolver la incidencia en el menor tiempo posible, o haya establecido una correcta política de copias de seguridad para poder reestablecer de nuevo la web.
Por SEO onpage (posicionamiento en buscadores)
Contar con algún profesional con conocimientos de posicionamiento en buscadores para realizar el mantenimiento de tu web puede resultar muy beneficioso.
En ocasiones se comenten fallos flagrantes en lo que se refiere al SEO onpage. Muchos sitios web están realizados por personas que vienen del mundo del marketing o del diseño, con pocos conocimientos técnicos y del modo de funcionar de los buscadores.
Cambiando algunas cosas básicas y realizando algunos ajustes en la página, puede mejorarse el posicionamiento y evitar penalizaciones de Google.
Además, que alguien con conocimientos SEO haga un seguimiento de los contenidos publicados e indique una serie de directrices sobre la elaboración de los mismos, puede tener efectos positivos en el posicionamiento.
Por tranquilidad
Contar con profesionales que se encarguen de velar por la seguridad de tu web, realizar las actualizaciones oportunas y revisen que todo funcione correctamente, hace que puedas centrarte en tareas operativas de tu negocio.
Esto es así tanto si cuentas con una web meramente informativa, como si la web es tu negocio en sí mismo o constituye un canal de venta más, como en el caso de una tienda online o servicios que ofreces bajo tu marca personal.
Es en estos casos donde contar con un correcto mantenimiento y con profesionales de garantía es más acuciante.
Por imagen y confianza
Sabemos que hoy en día hay mucha competencia en prácticamente todos los sectores. En internet, como se suele decir, la competencia está a un clic de distancia.
Por tanto, ¿qué opinarías si al entrar a una web ésta fuese lenta?, ¿si tuviese fallos?, ¿si no tiene textos legales o están mal elaborados?, ¿si tiene un diseño que no se adapta bien a móviles?, ¿si tiene aspecto de no haberse actualizado en años o meses?
Es posible que muchos de tus posibles clientes se decanten por otras páginas o negocios de la competencia.
La razón es que una web así no genera confianza al cliente o consumidor, y da la sensación de dejadez y abandono.
Si estás buscando un servicio completo de mantenimiento para tu web, puedes contactar con nosotros. O puedes contratar planes de mantenimiento WordPress específicos.
