El pasado año 2022 asistimos a una evolución importante de la Inteligencia Artificial (IA) en cuanto a la generación automática de contenido, principalmente en forma de texto y de imágenes.
Las claves de esta gran evolución han sido, por un lado, la mejora de los sistemas y algoritmos de IA, su potencia, capacidad, cantidad de parámetros e información con las que han sido entrenadas para afinar su comportamiento. Y por otro lado el acceso al público en general, masivo, de estas tecnologías.
Generación de contenidos mediante herramientas de IA
Herramientas como MidJourney, DALL-E 2, Stable Diffusion o DeepAI permiten generar imágenes originales al instante a partir de la descripción en texto que indiquemos.
En cuanto a la generación automática de texto, la revolución llegó a finales de 2022 con el lanzamiento de ChatGPT, una IA con la que podemos interactuar y conversar via chat, realizar preguntas y solicitar información.
La potencia y flexibilidad de ChatGPT es tal, que podemos realizar preguntas concretas y sencillas, o bien solicitarle un artículo periodístico sobre un tema determinado, un relato de cierto número de palabras con el tema que queramos, una receta de cocina a base de determinados ingredientes, solicitar explicación de un concepto o idea, etc.
Los textos introducidos para demandar información a las IAs o describir escenas de imágenes se denominan prompts. Tal es el éxito de estas tecnologías y las múltiples pruebas que millones de usuarios están realizando, que han surgido páginas web recopilatorias de los mejores prompts, bien sea porque con ellos se obtengan resultados espectaculares, artículos interesantes o imágenes muy curiosas.
Todo esto conlleva una serie de preguntas y cambios tanto en la nuestra sociedad, en determinados ámbitos profesionales que se producirán a corto-medio plazo (algunos ya están ocurriendo), en los buscadores y la forma de usar internet, etc.
Cuestiones y predicciones que vendrán con la IA
¿Desaparecerán los periodistas y redactores? ¿Cómo afectará la IA a los medios?
Algunos medios de cierta importancia han revelado que ya están usando IA para generar artículos, como CNET o BankRate.
Otros medios internacionales hacen uso de IA en otros ámbitos, como por ejemplo ayudar a sus redactores a obtener datos o seleccionar las imágenes de archivo más apropiadas.
No creemos que la profesión periodística vaya a desaparecer, pero con las herramientas de generación de textos actuales (y las que están por llegar), su labor girará más hacia la edición y revisión de la información y datos ofrecidos por las IAs, así como complementarlos con previsiones, opiniones personales…
Además las IA tienen una limitación importante. Pueden generar artículos sobre contenidos e información que tengan asimilados. Pero no pueden elaborar artículos sobre un suceso ocurrido recientemente porque lo desconocen. Para este tipo de información siempre harán falta periodistas y redactores.
La IA pueden ser una herramienta muy útil para medios y periodistas, a la hora de aligerar el proceso de elaboración de artículos, obtención y selección de imágenes, entre otras tareas.
¿Cómo afecta ChatGPT a Google y otros buscadores?
Hay quien ha dicho que ChatGPT acabará con los buscadores.
Parece una obviedad, pero debemos recordar que los buscadores como Google rastrean internet clasificando, ordenando y buscando información ya existente para proporcionártela, independientemente de si es reciente o lleva meses publicada. Herramientas como ChatGPT generan nueva información a partir de la ya existente, que es usada para su entrenamiento y aprendizaje.
Por tanto los buscadores siempre van a existir, aunque es probable que buena parte de búsquedas de datos concretos y relativamente invarialbes que las IA hayan aprendido se trasladen hacia herramientas como ChatGPT, en detrimento de los buscadores.
Google, según documentación oficial, no penaliza contenidos creados mediante IA. A Google le interesa que la información sea veraz y responda a las necesidades de los usuarios, independientemente de donde provenga y cómo haya sido generada esa información.
Por tanto, generar artículos mediante IA no debería perjudicar a medios digitales en su posicionamiento, aparición e indexación en Google si ofrecen información que satisfaga las necesidades y la curiosidad de los usuarios.
Otros buscadores tendrán una nueva oportunidad, como el caso de Bing. Microsoft está invirtiendo en OpenAI (la empresa creadora de ChatGPT), e integrarán algunos de estos servicios tanto en Bing como en sus plataformas de desarrolladores mediante API.
¿Cómo será la evolución de la IA a corto-medio plazo?
Todas las herramientas comentadas prácticamente no existían hace poco más de 1 o 2 años, o al menos no estaban disponibles para el público en general.
La evolución que está teniendo la IA en los últimos meses está siendo espectacular, produciéndose saltos cualitativos cada pocos meses.
Por ejemplo y para hacernos una idea, ChatGPT se estrenó a finales de 2022 y usa el modelo de OpenAI GPT 3, que cuenta con 175.000 millones de parámetros para su configuración y aprendizaje. Pues bien, GPT 4 usará 100 billones de parámetros (casi 600 veces más) y publicará a lo largo de 2023.
En 2023 tendremos herramientas de IA mucho más potentes y fiables que ofrecerán resultados sorprendentes.
Algunas empresas (no necesariamente grandes) empezarán a incorporar herramientas basadas en IA a algunos de sus procesos y tareas, incrementando su productividad. Desde luego, empezarán a tener una ventaja competitiva respecto a las que no usen estas tecnologías.
